En la Tertulia de ese mes, se ha propuesto hablar sobre el décimo aniversario del atentando al semanario satírico francés Charlie Hebdo. Recientemente han corrido ríos de tinta por la estampita de una vaquilla. Solo te dejamos dos referencias para que saques tus propias conclusiones.
Exactamente diez años después del ataque yihadista en el que murió la mayoría de su personal, el semanario francés Charlie Hebdo publicó un número especial para demostrar que su causa sigue vigente.
Las cosas cambiaron para siempre en Francia el 7 de enero de 2015, cuando, con un terrible acto de derramamiento de sangre, terminó la ingenuidad sobre la amenaza del islamismo militante.
Portada de la edición conmemorativa |
Los hermanos Said y Cherif Kouachi irrumpieron en una reunión en la oficina de París del semanario satírico y asesinaron a sus caricaturistas estrella Cabu, Wolinski, Charb y Tignous. En total, mataron a 12 personas, incluido un policía musulmán que estaba de servicio fuera de la sede del semanario. Dos días después, fueron acorralados y acribillados por la policía cerca del aeropuerto Charles-de-Gaulle.
Ese mismo día, Amedy Coulibaly –antiguo colaborador de Cherif en la cárcel– mató a cuatro judíos en una toma de rehenes sincronizada en un supermercado del este de París. Coulibaly –quien fue abatido por la policía– había matado a una agente el día anterior.
Una década después, Charlie Hebdo sigue publicando una edición semanal y tiene una tirada (en papel y online combinadas) de alrededor de 50.000 ejemplares. Lo hace desde una oficina cuyo paradero se mantiene en secreto y con personal protegido por guardaespaldas.
Pero en un editorial de la edición conmemorativa, el principal accionista del periódico dijo que su espíritu de irreverencia antirreligiosa y obscena sigue muy vivo. «El deseo de reír nunca desaparecerá», dijo Laurent Saurisseau –también conocido como Riss–, un dibujante que sobrevivió al ataque del 7 de enero con una bala en el hombro.
«La sátira tiene una virtud que nos ha ayudado a superar estos años trágicos: el optimismo. Si se quiere reír, es porque se quiere vivir. La risa, la ironía y la caricatura son manifestaciones del optimismo»...
Fuente: BBC
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Recuerda la netiqueta al comentar.